Sabado 19 de febrero de 2011

Apoyados en la dinámica comandada por un par de debutantes en la Primera División como Jorge Mora y Antonio Gallardo, el Guadalajara conquistó el primer triunfo del Torneo Clausura 2011 en la cancha del Estadio Omnilife al derrotar con marcador de 4-1 a los Tuzos del Pachuca en cotejo correspondiente a la Jornada Siete.

Como un rayo fulminante, el Guadalajara arrancó el duelo ante Pachuca y tenía que ser con una jugada rápida y mortal entre Erick Torres y Jorge Mora, uno de los dos jóvenes de la cantera rojiblanca que José Luis Real presentaba en la palestra del Máximo Circuito y el delantero rojiblanco no decepcionó a su técnico, y con el gol más rápido del Torneo Clausura 2011 a los 28 segundos venció por abajo a Miguel Calero, para poner el 1-0 en los cartones y hacer explotar al Omnilife.

Cada embate del Rebaño era dinamita pura para el Pachuca, al 12’ la oleada rojiblanca se dio en una jugada donde Omar Esparza se fajó en serio para llegar hasta las barbas de Calero y en un rebote de la defensa hidalguense, Alberto Medina, el mismo que estaba a punto de cumplir los 365 días sin gol rompió su maleficio para gritar una vez más el gol que era el segundo de la noche para su equipo.

El Guadalajara ahogaba con su dinámica a un Pachuca al que le costaba tomar el balón y en pleno momento de auge, Alberto Medina comandó un nuevo arribo en el que combinó con Erick Torres, quien a su vez dejó pasar la pelota para la llegada franca de Jorge Mora, cuyo remate vistoso fue a dar al poste del colombiano Calero que se multiplicaba para detener al torbellino en rojo y blanco de Chivas.

El Rebaño arrasaba y era literal sobre unos Tuzos que se veían perdidos en la cancha del Omnilife, mientras el espectáculo corría a cargo de unos jóvenes rojiblancos con hambre, deseo, corazón y sobre todo buen futbol al que la afición le otorgaba de manera merecida el ole como en la fiesta brava.

En plena euforia, un inspirado Jorge Mora avanzó con propiedad sobre tres cuartos de cancha y cedió el esférico para Erick Torres, quien en una de sus clásicos remates a la media vuelta impactó el esférico con esa fuerza y motivación juvenil le puso toda la vida al balón que terminó durmiendo en las redes del Pachuca por tercera ocasión en la noche para el 3-0 de los rojiblancos al 35’ de acción

Primer tiempo soñado para el Guadalajara, todo le salió a la perfección, con un equipo en concentración absoluta, donde los once rojiblancos sabían exactamente que hacer y como atacar a su contraparte hidalguense que prácticamente no creo peligro sobre la portería de Luis Ernesto Michel en este primer lapso la entrega de la afición como colofón de este primer lapso era el fiel reflejo del festejo absoluto que se escenificaba en el Estadio Omnilife.

En la parte complementaria el cuadro visitante enseñó su coraje cuando Hércules Gómez se internó por la derecha, mandó centro pasado y el paraguayo Édgar Benítez puso el primero en el casillero para su equipo para darle honra a su equipo en el cotejo.

Para confirmar su buen partido, al 59’ Alberto Medina combinó con Omar Esparza, quien perforó a la defensa tuza y cedió el balón al nacido en Culiacán, Sinaloa, quien con un disparo con toda colocación anotó su segundo gol de la noche y el 4-1 del Guadalajara para de esta manera exorcizar los demonios que le amenazaban a lo largo del Torneo Clausura 2011.

Tratando de redondear su destacada actuación, Jorge Mora, quien ni por un segundo dio a notar de que se trataba de su presentación en la Primera División disparó de pierna zurda e hizo vibrar la meta de Miguel Calero quien no dejó de sudar frío y siguió con la vista el tiro del delantero tapatío.
Chivas seguía con hambre, entusiasmo, ilusión y esas ganas de ser y demostrar con las que le decía al Pachuca que en esta ocasión el festejo era por y para una nación rojiblanca que disfrutaba del espectáculo ofrecido por su equipo.

Para ponerle hielo a las acciones, desde la banca José Luis Real comenzó a darle rotación a su ajedrez y envió al terreno de juego a Édgar Mejía, Omar Arellano y Adolfo Bautista en lugar de los hombres que se llevaron la noche entre aplausos y ovaciones ganadas a pulso como Jorge Mora, Erick Torres y Alberto “Venado” Medina.

El primer triunfo del Guadalajara en la cancha del Estadio Omnilife del actual Torneo Clausura 2011 debía marcarse sin objeción alguna y así fue, por increíble que parezca comandados por el espíritu inquebrantable de un par de jóvenes debutantes que contagiaron a todo el mundo en la noche de su debut, encendieron a los Alberto Medina, Jonny Magallón, Omar Esparza, Luis Michel y compañía, y que quedará como huella imborrable en la memoria de Jorge Mora y Antonio Gallardo, Chivas vive como nunca antes en el torneo, la siguiente escala, la selva lacandona de los Jaguares de Chiapas. Muchas noches como esta Rebaño, tus millones de aficionados que son todo un pueblo mexicano así te lo piden, una noche de magía y encanto.