1 El Color Chivas vs. Tigres Liguilla Jue Mayo 05, 2011 3:29 pm
☆ELY CARTER☆
Leyenda
Miercoles 4 de mayo de 2011
¿Por qué ganar Chivas? Es la pregunta que lanzó tu fanaticada minutos antes de arrancar el duelo de Cuartos de Final ante los Tigres del Universitario de Nuevo León. La respuesta está en tu afición que volvió a hacer una entrada muy respetable en la cancha del Estadio Omnilife, que poco a poco le ha tomado sabor a su nueva y espectacular casa.
¿Por qué ganar Chivas?, porque tienes hambre, juventud, talento, deseo, y porque has hecho buena la sentencia de José Luis “Güero” Real en el sentido de que hay que pararse en la cancha sin ningún respeto al superlíder y a su técnico, un viejo lobo de mar como Ricardo “Tuca” Ferreti.
¿Por qué ganar Chivas?, porque el futbol por fin le ha regalado la luminosa sonrisa del gol a Omar Arellano, quien en su recuentro con el buen futbol lo protege la tradición y abolengo de su cuna rojiblanca, por eso el festejo y el salir disparado al encuentro con sus compañeros.
¿Por qué ganar Chivas?, porque el silencioso pero regular Mario de Luna se levantó en todo lo alto para meter un testarazo que dejó sin oportunidad a Enrique Palos y a los Tigres del Universitario de Nuevo León y así le devolvía una ventaja a los tapatíos que no perderían en el resto del encuentro.
¿Por qué ganar Chivas?, porque has derrocado a la mejor defensa del Torneo Clausura 2011, porque Marco Fabián sigue en un momento esplendoroso y tuvo los arrestos para pararse frente al balón y clavarle el tercer dardo al felino regiomontano y ha vuelto importante la ventaja para la cita en el Volcán del próximo sábado.
¿Por qué ganar Chivas?, simplemente Rebaño por tu historia de grandeza, porque los equipos grandes saben jugar la Liguilla, porque eres la alegría de millones de corazones con tus triunfos, por la confianza que siempre depositas en el jugador joven mexicano, porque enciendes la Fiesta Grande, porque tu santuario es una fortaleza, porque el Guadalajara, Guadalajara del mariachi suena como nunca en tu noche de indiscutible ganador.