Miercoles 23 de febrero de 2011

Todo parecía como un día normal en las instalaciones del Club Chivas San Rafael, los usuarios llegaron como todos los días para realizar sus rutinas, algunos en la alberca, otros en el gimnasio y algunos más en la cancha de tenis. De pronto comenzó la movilización de todo el personal del club para acondicionar las diferentes áreas que rodean la cancha de futbol.

En unos momentos todo quedó listo para recibir por primera vez en el Club Chivas San Rafael al equipo más querido de México, pues el entrenamiento programado par este miércoles fue realizado en sus instalaciones, los usuarios y socios del club se comenzaron a reunir alrededor de la cancha de futbol, esperando ver a sus ídolos que poco a poco fueron llegando al vestidor.



La afición rojiblanca se congregó a los lados de la cancha para mostrar su apoyo, cariño y arropar al Rebaño en su preparación para el duelo de este sábado en Tuxtla Gutiérrez, en donde enfrentarán a los Jaguares de Chiapas, en busca de lograr su segunda victoria consecutiva y tercera del campeonato mexicano.

Sin importar que el sol cayó a plomo durante el entrenamiento, los seguidores rojiblancos se acomodaron en el mejor lugar que encontraron, había familias completas que observaban con atención todos los movimientos que realizaron los integrantes del Rebaño dentro del terreno de juego. Se escuchó a un aficionado narrar las jugadas que realizaron durante el trabajo de espacios reducidos que hicieron los jugadores tapatíos.



“¡Jonny, Jonny! Se escuchó a unos pequeñines llamar al zaguero cuando pasó cerca de ellos en el entrenamiento y a otras aficionadas accionar sus cámaras y sus celulares para tomar la fotografía para tener un recuerdo de este día tan especial. También un padre le explicaba a su hijo la forma en que golpeaban la pelota los jugadores, los movimientos que realizaban, como corrían dentro de la cancha, cosas que el niño escuchaba y observaba con atención.

Luego de poco más de dos horas, el entrenamiento llegó a su fin y los jugadores se acercaron para convivir con la fiel afición rojiblanca, firmaron playeras, gorras, cuadernos, zapatos y cualquier objeto que sirviera para guardar la ansiada firma, platicaron con ellos y se tomaron la tradicional foto del recuerdo.



Poco después del medio día, cuando todos los jugadores del Guadalajara abandonaron las instalaciones del Club Chivas San Rafael, las actividades comenzaron a volver a la normalidad, dejando para el recuerdo la visita del equipo más popular de México.