Viernes 12 de agosto de 2011

Morelia, Michoacán.- "No hay plazo que no se cumpla, ni fecha que no se llegue", reza un conocido refrán mexicano que alude a que para todo hay un tiempo, y ese tiempo para los Monarcas llegó la noche del viernes en su casa, el Estadio Morelos.

Porque con nueve hombres en el campo, producto de las expulsiones de Jonny Magallón y Patricio Araujo en el segundo tiempo, Chivas sacó el ímpetu y las ganas de dejar atrás ocho duelos sin conocer el triunfo ante Monarcas en el campo del Morelos, y basados en el orden y la precisión en las jugadas, más la dosis de desequilibrio que poseen los jóvenes de Rebaño, Chivas se impuso al conjunto purépecha por 2-1.

Tras un inicio movido, en el que ambos equipos buscaron la portería contraria, Guadalajara fue quien tuvo las primeras aproximaciones reales de peligro en el arco de Federico Vilar, pues la verticalidad y velocidad de los artilleros Alberto Medina, Omar Arellano y Marco Fabián, evidenciaron con sus jugadas que la zaga de Morelia tendría constantes arribos de Chivas por resolver.

Ya que apenas a los cuatro minutos, Omar Arellano ingreso al área de frente a Vilar, y justo antes de conectar para definir, Aldo Leao llegó a la marca para sacarlo de balance y evitar la caída de su marco. Segundos después, Marco Fabián se hizo presente en el área y tras aprovechar un error en la zaga disparó con intención, pero apenas desviado por un costado.

Monarcas intentaría frenar los embates del Rebaño basado en contragolpes largos hacia los movimientos de Miguel Sabah, pero aun y cuando el delantero michoacano logró hacerse de la pelota en diversas ocasiones, la defensiva del Rebaño encabezada por Héctor Reynoso impidió que los ataques del cuadro local tuviera efecto en la puerta de Luis Michel.

Durante los siguientes minutos del primer tiempo la dinámica del partido fue la misma, con un Rebaño ágil en su desempeño para crear jugadas de peligro, pero carente de concretar en el último toque, mientras que por los Monarcas, el tratar de recuperar la pelota para lanzar a sus delanteros a los espacios fue su mejor argumento para generar peligro.

Pero el primer tiempo se extinguió y la anotación brilló por su ausencia, no así las ocasiones del Rebaño que una y otra vez, con Jesús Sánchez por la banda derecha y un Alberto Medina por la izquierda, insistentes en generar centros al área, pero aunado a la defensiva de Monarcas, la labor de definición frente al marco se le negó a Chivas.

Sin embargo para el complemento, Guadalajara saltó a la cancha del Morelos con la misma consigna de dejar atrás una racha negativa de partidos sin conocer el triunfo en esta cancha y por ello, basados en la precisión de los pases y en el correcto y eficaz traslado de la esférica, encontraría en una jugada de contragolpe la oportunidad de abrir el marcador.

Ya que a los 51 minutos, tras un desborde por el costado izquierdo que Gerardo Lugo no pudo cortar, Miguel Ponce ingresó al área por el costado izquierdo y ya dentro del área, filtró con potencia hacia el centro del área chica, donde sin poder hacer más, Yasser Corona no logró eludir la trayectoria de la pelota y terminó por incrustarla en su arco para el primer tanto del Rebaño.

Pero en la siguiente jugada del partido, tras una serie de toques que derivaron en un desborde de Gerardo Lugo, el volante michoacano filtró balón al manchón de penal, donde Michel Sabah acomodó para la llegada de Damián Manso quien de primera intención definió de pierna zurda, lejos del alcance de Luis Michel para así, convertir el empate para los Monarcas a los 52 minutos.

Ya con el empate, Chivas vería mermado su rendimiento en la cancha cuando a los 57' de juego, tras una acción en la disputa por la pelota en medio campo junto a Jorge Gastelum, el silbante Juan Genaro Medrano expulsó al zaguero de Chivas Jonny Magallón por una aparente falta sobre el jugador de los Monarcas, situación que dejó en desventaja al Rebaño, que tuvo que sacrificar a Arellano para el ingreso de Mario de Luna y solventar así el cuadro bajo.

Minutos más tarde, con el ingreso de Javier Ledesma en sustitución de Marco Fabián, Guadalajara plantó bien a su zaga defensiva y trabajó para que basados en el orden, el Rebaño comenzara a fabricar ocasiones que le dieran aproximaciones al arco para así buscar el triunfo.

Pero a los 71 minutos, en búsqueda del esférico sobre Damian Manso en media cancha, Patricio Araujo barrió con fuerza directo a la esférica, pero por lo aparatoso de la jugada, el silbante central consideró como Juego Brusco Grave la entrada del mediocampista de Chivas y por ende, expulsó al contención del Rebaño.

La inferioridad numérica del Rebaño ocasionó una nueva modificación, ya que el timonel José Luis Real envió al campo a Antonio Gallardo en el sitio de Alberto Medina, por lo que con un solo punta, en la figura de Jesús Sánchez, el Rebaño apostó por el orden defensivo y los pases al espacio para buscar en en ofensiva al novel canterano rojiblanco.

Y el esfuerzo y la táctica rindieron fruto.

Porque la velocidad y desequilibrio de Jesús Sánchez fue el mayor dolor de cabeza para la defensiva de Monarcas, pues en un pase desde la banda y hacia el espacio, el canterano rojiblanco enfrentó la marca de tres adversarios michoacanos, en el primer embate les dejó sin ocasión para despojarlo de la pelota, pero en el segundo amague el artillero de Chivas fue letal.

Cerca de línea final Jesús Sanchez avanzó y salió avante de dos barridas, con el panorama claro y ya dentro del área centró con potencia para la llegada por el centro de Antonio Gallardo, quien al intentar rematar y no conectar como debería, Federico Vilar se venció hacia un costado, por lo que por la inercia de la jugada el simple choque de la pelota con Gallardo fue suficiente para convertir el segundo tanto de Chivas, el que con dos hombres menos le abría la puerta para sacar los tres puntos en campo ajeno.

Y el tiempo apremió, y las aproximaciones con las que Monarcas se fue con todo al frente quedaron sólo en eso, en avisos a la cabaña de Luis Michel, pues aunque en la última jugada del partido se valió hasta de su portero para buscar el agónico empate, la historia ya estaba escrita. Chivas, con nueve hombres, rompió la racha negativa de ocho encuentros sin ganar en el Estadio Morelos, misma que con el ensordecedor grito de triunfo de la afición rojiblanca presente en el Morelos, pasó a la historia.