Viernes 28 de enero de 2011

Guadalajara dominó a los Estudiantes, tuvo el control del partido prácticamente todo el encuentro, generó las opciones más claras de gol, tuvo a merced en inumerables ocasiones a los Estudiantes y sin embargo, en tiempo de reposición, una desatención defensiva en el área rojiblanca, bien cristalizada por Eduardo Lillingston, terminó por inclinar la balanza a favor de los locales.

Desde los primeros minutos, Guadalajara tomó la iniciativa del partido, ya que gracias a su control del esférico en medio campo, a la solvencia defensiva que mostró de arranque y al desequilibrio y hambre de su gente de ataque, las ocasiones de gol para el Rebaño no demoraron en llegar hacia el arco de Christian Martínez.

Apenas a los 14 minutos de juego, Marco Fabián se aproximó al área enemiga y disparó con potencia, sin embargo, su potente y raso envío se escurrió por un costado de la cabaña de los Estudiantes, mismo caso que el disparo de Erick Torres a los 23', cuando cerca del manchón penal generó una oportunidad, disparó con colocación, pero de igual forma la esférica se fue por un costado.

Salvo por algunas aproximaciones del cuadro estudiantil, bien solventadas por la defensiva rojiblanca, el Rebaño hizo suyo gran parte del primer lapso, pues el desequilibrio de Omar Arellano, los constantes arribos por el centro del campo de Marco Fabián y la siempre incisiva presencia de Erick Torres dentro del área, lograron que las ocasiones de gol se inclinaran a favor de Chivas, sin embargo, la definición en la puerta no se llegó en los primeros 45 minutos.

Entrado el segundo tiempo, la dinámica de Chivas no cambio, pues en total contraste del cuadro de Estudiantes, quienes hicieron de los trazos largos su arma para intentar aproximarse al área de Chivas, Guadalajara mantuvo su trato de pelota, sus salidas con pelota controlada y el constante desequilibrio de medio campo hacia el frente, sin que éste pudiera reflejarse de inmediato en el marcador.

Hacia los 60 minutos de juego, Marco Fabián robó una pelota en tres cuartos de cancha a base de fuerza y determinación, al quedarse con la esférica avanzó unos metros y justo antes de llegar a la línea del área sacó un potente disparo directo al ángulo superior izquierdo del portero, sin embargo, la pelota abrió en el último tramo y escurrió por un costado, en uno de los más claros avisos del cuadro rojiblanco.

Pero la insistencia de la artillería de Chivas se intensificó con el paso de los minutos. A los 73, Alberto Medina recibió por alto una pelota de Patricio Araujo; dentro del área el Venado controló, se adornó con un sombrerito para eludir la marca del rival, se acomodó la esférica para bombear hacia el palo contrario del portero, y aunque la esférica tomó dirección de gol, se fue apenas por un costado de la cabaña de Estudiantes.

Conforme transcurrieron los minutos, la intensidad ofensiva de Chivas aumentó, con las modificaciones efectuadas con el ingreso de Adolfo Bautista y Jesús Sánchez, Guadalajara tuvo una aún mayor presencia en terreno enemigo, pero ni las aproximaciones de Erick Torres, los desbordes de Arellano y Báez y la presencia del "Bofo" en el área enemiga, Guadalajara pudo concretar la opción que le diera su primer triunfo en el Clausura 2011.

Y justo cuando ya se disputaba el tiempo de reposición, hacia los 93 minutos Rubens Sambueza lanzó un servicio al área, mismo que Eduardo Lillingston se acomodó para de primera intención disparar directo al arco, a lo que Luis Michel no pudo hacer nada para detener el envío y con ello evitar la caída de su marco, consecuencia que segundos después, con el silbatazo de Roberto García Orozco, oficializó la primer derrota del torneo para Chivas.